La importancia de tener las llaves, encontrar dónde las
dejamos y finalmente empuñarlas. Son el verdadero símbolo de la libertad. No
puedo recordar cuando me dieron las llaves de mi casa, pero puedo figurarme esa
sensación. Recuerdo la entrega de llaves en la primera transacción inmobiliaria. Mi
última adquisición de llaves fueron las del auto, acompañada de lágrimas de emoción.
Abrir y cerrar… que maravillosos tesoros guardará esa puerta por abrir? Que
alivios tranquilizaran el alma al cerrar esos capítulos oscuros? La llave de la
felicidad, la del corazón, las llaves que correrán pesados cerrojos, manojo de
llaves en busca de la cerradura correcta.